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Soy un virus. La Tabaré con Enrique Symns



SOY UN VIRUS

Conozco el dolor del niño
Cuando bajaba con el afiebrado
Hacia la costa de las aventuras
Y me encontraba siempre con esa cárcel de rutinas
En qué consiste la vida
Porque Estamos aquí donde todo dolor
Y todo te resulta gratis
Porque el sol se quema todos los días
Como un bonzo
Que se suicida por tristeza
En donde las sonrisas terminan siempre en puñaladas
Y donde el primer pez cuando tuvo hambre
Se convirtió en asesino
El dolor de estar aquí
En Donde los pájaros aprenden a leer y a escribir las leyes que prohíben volar

Esos viejos flacos y orgullosos en el supermercado
Arrastrando un carrito vacio con los ojos bajos y en silencio
Porque ellos creen que el silencio es de bravos
Esos viejos muertos de hambre
Que Trabajaron toda una vida y no se roban ni una uva
Esos viejos que se cruzan con un muchacho rubio de pelo largo que no los ve
Porque va pensando en el futuro
Porque este es un mundo
Dé jóvenes que olvidan su origen
De viejos que no recuerdan el destino
Pero si las moscas usaran corbata
Si las balas cantaran blues
Si el cielo sacudiera su viejo culo azul
Si las ventanas catódicas de los edificios explotaran
Igual, igual abría un anciano babeando fantasías
Sobre las piernas de una muchacha
Igual habría todos ellos tipos con caras de esclavos sonriendo por la calle del mundo

En una tribu de monos
En una fiesta de esclavos
En una calle de zombis
Yo no soy un hombre, soy un virus en tu mente

Un hombre solo, en un cuarto regando una planta
Sufriendo Porque nadie le habla o nadie lo toca
Y solo le cabe recordar
O las camareras de los bares nocturnos de polleras cortas
Que van Naufragando entre las brumas del deseo
O las conversaciones de mis amigos que antes soñaban se héroes
Y ahora cobran un sueldo
Están inyectando una jeringa de miedo en las venas del mundo

Yo no siento ni pienso
Yo no amo ni odio
Yo no vivo ni muero
Tú no puedes conmigo
Soy un virus en tu mente

Yo tenía 20 años y siempre estaba borracho En una pieza mugrienta
Viendo reflejar mi rostro sobre las frías paredes del mundo
Ahora tengo casi 60
Y nunca lo vi
Nunca vi a un hombre encendido y llameante
Un hombre que rebatará la mano para encender un cigarrillo
Yo viera en sus ojos los ojos de un tigre
Asechando en el viento el paso del tiempo
Para matarlo Siempre vi los ojos del miedo
Siempre vi los ojos tristes de la nostalgia

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